CHELIÁBINSK.- El número de muertos por el derrumbe parcial de un edificio en la ciudad rusa de Magnitogorsk aumentó a 20 este miércoles 2 de enero, informó el servicio de prensa del Departamento Principal del Ministerio de Emergencias en la provincia de Cheliábinsk. Entre los nuevos fallecidos se encuentran dos niños.
Por otra parte, los rescatistas encontraron con vida a un bebé de 10 meses bajo los escombros. El pequeño sufrió un traumatismo craneoencefálico cerrado y congelación severa debido a las bajas temperaturas del país en esta época.
La cantidad de desparecidos continúa siendo alta, por lo que los trabajos en la zona que comenzaron el 31 de diciembre continuarán.
Borís Dubrovski, gobernador de la región rusa, declaró este miércoles 2 de enero como día de luto para conmemorar la muerte de las personas. Además, previamente declaró estado de emergencia y prometió a los residentes de los departamentos reubicarlos y al mismo tiempo brindarles la asistencia necesaria.
El edificio ruso se desplomó parcialmente en el último día del año a raíz de una explosión de gas. Más de 1.300 personas trabajaron en la escena, tanto para rescatar a los afectados como para reconstruir el edificio, sin embargo estas actividades se vieron afectadas por dos cuestiones: las bajas temperaturas y las grandes probabilidades de derrumbe en la parte del establecimiento que quedó entera.