SAN SALVADOR.- Cientos de militares y fuerzas de la Policía Nacional Civil (PNC) ocuparon el domingo la Asamblea Legislativa de El Salvador en apoyo al presidente Nayib Bukele, que había convocado una sesión extraordinaria para forzar al Parlamento a aprobar un préstamo de 109 millones de dólares para financiar la fase III del Plan Control Territorial, un plan de seguridad contra las pandillas.
Partidarios del mandatario estaban reunidos a las afueras del edificio legislativo ateniendo un llamado de Bukele, quien advirtió el viernes a los legisladores que los ciudadanos tienen “derecho” a la “insurrección” si no atienden su petición de obtener dicho préstamo.
#ElSalvador I Francotiradores están colocados en los edificios del centro de Gobierno, luego del llamado de #NayibBukele a presionar a la Asamblea Legislativa para que apruebe un millonario préstamo. Vía: El Diario de Hoy. https://t.co/j3hkNxwQZT pic.twitter.com/uesLE0WeYK
— República (@republicagt) February 9, 2020
“Démosle una semana a estos sinvergüenzas. Los convocamos de nuevo si no aprueban el plan. Y si no, yo no me voy a poner entre el pueblo y el artículo 87 de la Constitución. Quedará en sus manos”, dijo Bukele desde una tarima instalada en la entrada del Congreso, tras haber ingresado brevemente y hacer una oración desde el curul del presidente del Congreso.
#ElSalvador #NayibBukele #Dictadura Y asi es como se rompe la poca constitucionalidad que le quedaba a mi pais pic.twitter.com/VaM8VHFUcC
— Jorge Arevalo (ElYorch) (@J0R91T0_AH) February 9, 2020
El movimiento del presidente para presionar a los legisladores fue respaldado por el ministro de Defensa, René Merino, y el director de la policía, Mauricio Arriaza, pero fue cuestionado por las organizaciones de derechos humanos.
El director de la policía señaló que la presencia de efectivos armados dentro del salón de sesiones del palacio legislativo fue para resguardar al mandatario, cuya ocupación del lugar del presidente del Congreso puede considerarse una invasión a otro poder del Estado según las leyes de ese país centroamericano.
La oposición al mandatario sudamericano denunció un intento de “autogolpe de Estado» en marcha con una ofensiva dirigida a la Asamblea Legislativa, y una grave transgresión a la democracia.
En junio del año pasado, Bukele asumió el poder como presidente de El Salvador, y en una ceremonia solemne aseguró que su Gobierno sería un “gobierno del pueblo”, pero en realidad, adoptó una política similar a la de Estados Unidos y completamente diferente a la de su antecesor, Salvador Sánchez Cerén.
Más tarde, Bukele hizo un llamado “al pueblo salvadoreño a mantener la calma ante los hechos ocurridos en la Asamblea Legislativa por la negativa de los diputados de asistir al Consejo de Ministro donde se discutiría el préstamo”, según informó Presidencia en un comunicado.
Aunque los homicidios en El Salvador se han reducido en 28% en 2019, las autoridades luchan día a día contra las pandillas llamadas “maras” que controlan los territorios más marginales de ese país centroamericano.
[…] antes de dar el ultimátum, el joven presidente había entrado a la sede del Congreso rodeado de policías antimonitenes y soldados del Ejército que portaban chalecos antibalas y fusiles de […]