BERLÍN.- El año pasado, la tasa de criminalidad en Alemania disminuyó un 5%, y llegó a su mejor número después de 26 años. La mala noticia es que el nivel de antisemitismo creció un 2,5%.
«Alemania es un país más seguro», dijo el el ministro del Interior, Horst Seehofer. Y agregó: «Sin embargo, no hay que bajar la guardia. Las fuerzas de seguridad tienen todavía mucho trabajo que hacer».
En detalle, el 55,7% de los delitos ocurridos en 2017 fueron esclarecidos; hubo una caída del 11,8% en los robos y de un 2,4% en delitos violentos. Sin embargo, crecieron un 12,9% los delitos relacionados con pornografía infantil y menores, al igual que los ataques contra policías. Hubo un crecimiento del 28,7% en delitos económicos y los relacionados con drogas aumentaron casi un 10%.
Las estadísticas publicadas el martes por el Gobierno de Ángela Merkel informó que un 75% de los 1,98 millones de delincuentes detenidos el año pasado eran hombres y el 30% no tenían pasaporte alemán.