GINEBRA.- La pandemia del nuevo coronavirus puede causar que 25 millones de personas pierdan su trabajo en todo el mundo, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
“Basándose en diferentes escenarios del impacto del COVID-19 sobre el crecimiento del PIB (Producto Interno Bruto) global, las estimaciones preliminares del OIT indican un aumento en el desempleo global de entre 5,3 (escenario bajo) y 24,7 (escenario alto) millones de personas”, reza el informe de del organismo publicado en su sitio web.
La incertidumbre y el desconocimiento sobre el nuevo coronavirus llegó a los mercados de valores y economías del mundo durante las últimas semanas.
La dificultad para contener la expansión de la epidemia ha obligado a distintos gobiernos a aplicar medidas extraordinarias, como cerrar empresas, edificios públicos y comercios, además de limitar la circulación.
En consecuencia, se ha reducido el consumo, la producción y el turismo en la mayoría de los países afectados. Y eso tiene consecuencias económicas, en algunos casos muy graves.
En comparación, durante la crisis de los años 2008 y 2009, unos 22 millones de personas perdieron sus puestos de trabajo. “La oferta laboral se está reduciendo debido a las medidas de cuarentena y la caída en las actividades económicas”, sostiene el documento.
La OIT predice que los empleados perderán entre 860.000 millones de dólares y 3,4 billones de dólares, lo que por efecto dominó representará una caída del consumo de productos y servicios.
“La crisis se ha transformado ya en un choque para la economía y al mercado laboral, afectando no sola la oferta (fabricación de productos y servicios), sino también la demanda (consumo e inversiones)”, advierte la organización de las Naciones Unidas.
Sin embargo, la OIT destacó que, si la comunidad internacional responde con una política eficaz y coordinada de lucha contra el patógeno, como lo hizo durante la crisis de 2008-2009, podría amortiguar considerablemente el impacto sobre el empleo global.