WASHINGTON.— La congresista republicana Marjorie Taylor Greene ha instado a una exhaustiva investigación en torno al presidente Joe Biden, tras las recientes revelaciones del exfiscal ucraniano.
Las afirmaciones del exfiscal, Víktor Shokin, que implican al mandatario en posibles actos de corrupción, han impulsado a Greene a solicitar una investigación de destitución al comienzo de las sesiones del Congreso en septiembre.
El proceso requerirá la aprobación de la Cámara de Representantes, donde se decidirá si se inicia formalmente la investigación que podría desencadenar un proceso de destitución.
Las acusaciones emitidas por Shokin el 25 de agosto, en una entrevista transmitida por Fox News, han agitado el panorama político. Shokin alegó que su destitución fue influenciada por sobornos y que Biden, en su rol como vicepresidente, habría proporcionado 1.000 millones de dólares a cambio de su remoción.
No es la primera vez que se levantan preocupaciones en torno a Biden y alegaciones de corrupción. El senador Chuck Grassley presentó información del FBI que sugiere un esquema de corrupción con posibles implicaciones de Biden. Además, el candidato presidencial Vivek Ramaswamy ha insinuado que la ayuda a Ucrania podría estar conectada con actividades cuestionables de Biden.
El exfiscal Víktor Shokin ha emergido como una figura central en este debate, ya que su destitución en 2016 ha sido objeto de controversia. Algunos especulan que su remoción fue resultado de la presión ejercida por Joe Biden, quien en aquel entonces era el vicepresidente de Estados Unidos y encargado de asuntos relacionados con Ucrania en la Administración Obama.
Biden ha sostenido en repetidas ocasiones que no tuvo participación en los negocios de su hijo Hunter Biden, cuyas actividades comerciales están siendo investigadas por la Cámara de Representantes, en su mayoría controlada por miembros del partido republicano.
La polémica en torno a las acciones de Biden durante su vicepresidencia y su relación con Ucrania sigue generando debate y atención mientras se espera el inicio de la sesión del Congreso en septiembre.