BERLÍN.- El superávit comercial de Alemania se redujo en el primer semestre del año. Esto porque la fuerte demanda interna hizo que las importaciones crecieran más rápido que las exportaciones.
Esto suma señales de la mayor economía de Europa está reduciendo lentamente su dependencia de las ventas del exterior.
El Fondo Monetario Internacional y la Comisión Europea exhortaron a Alemania durante años que haga más por aumentar la demanda interna. De esa manera se impulsarían las importaciones. Además de estimular el crecimiento en otras partes y reducir los desequilibrios económicos mundiales.
Tradicionalmente la economía alemana está orientada a la exportación. Sin embargo, ahora enfrenta vientos como la deceleración económica mundial, los conflictos comerciales y la incertidumbre del Brexit.
Sin embargo, Alemania goza de amortiguadores internos como un empleo récord, aumentos salariales que impulsa la inflación y el bajo coste del crédito.
La Oficina Federal de Estadística dijo el viernes que las importaciones subieron un 3,0% hasta 556.200 millones de euros (622.200 millones de dólares) en los primeros seis meses del año. Mientras que las exportaciones lo hicieron en un 0,5% hasta 666.100 millones de euros.
Exportaciones alemanas registran su peor dato en tres años
Las exportaciones alemanas experimentaron el pasado junio una caída interanual del 8%, el peor dato en tres años, según datos de la Oficina Federal de Estadística difundidos este viernes.
La industria alemana, fuerte en sectores como la química o los motores, depende en buena medida de la demanda de empresas extranjeras. Y dos de los primeros clientes de Alemania, China y Estados Unidos, disputan una guerra comercial de futuro incierto.
El mal momento de las exportaciones amenaza el crecimiento de la primera economía de la zona euro, que espera crecer un 0,5% este año.