BOGOTÁ.—El presidente de Colombia, Gustavo Petro, impulsará una consulta popular para que la ciudadanía decida el futuro de las reformas laboral y de salud, actualmente estancadas en el Congreso debido a la oposición. En caso de ser aprobadas en la consulta, el Estado deberá proceder con su implementación.
De las tres reformas sociales presentadas por el gobierno, la previsional ya obtuvo la aprobación del Congreso y se encuentra en revisión por la Corte Constitucional. La reforma laboral, en cambio, ha generado resistencia en el sector empresarial, ya que introduce cambios significativos en la normativa vigente sin contar con un estudio detallado de su impacto en la generación de empleo.
Por otro lado, la reforma de salud ha generado un intenso debate en la sociedad. El actual sistema sanitario enfrenta críticas constantes debido a la escasez de medicamentos y las dificultades en el acceso a tratamientos.
La propuesta del gobierno busca eliminar el modelo de prestadoras de salud y establecer un sistema controlado directamente por el Estado, una medida que ha encontrado menos respaldo en la opinión pública.
Desde el punto de vista electoral, la posibilidad de que la consulta popular prospere es incierta. Se estima que serían necesarios alrededor de 13 millones de votos para validar el proceso, una cifra superior a los 11 millones obtenidos por Petro en las últimas elecciones presidenciales.
Además, la pérdida de apoyo en ciertos sectores ha reducido la capacidad del gobierno para movilizar votantes con la misma eficacia que en los comicios previos.
En un intento por fortalecer el respaldo a sus reformas, el presidente convocó una movilización nacional para el 18 de marzo, declarando ese día como cívico, con el objetivo de promover el debate sobre los cambios propuestos.
Mientras tanto, en Honduras, las elecciones primarias del 9 de marzo reflejaron tanto el descontento ciudadano por las fallas en la distribución del material electoral como el respaldo al partido Libertad y Refundación, cuya candidata, Rixi Moncada, obtuvo una victoria contundente. Durante el proceso, se registraron irregularidades en el transporte de las boletas, lo que afectó el desarrollo de la jornada.
Moncada se consolidó como la aspirante presidencial con mayor respaldo, obteniendo más del 95% de la intención de voto dentro de su partido. De resultar electa en los comicios de noviembre, contaría con un parlamento alineado con sus propuestas, lo que facilitaría la implementación de su agenda política. Su perfil destaca por una trayectoria en distintos ámbitos de la administración pública y la educación, lo que la posiciona como una figura clave en el escenario político hondureño.