BUENOS AIRES.- Argentina decidió este domingo no seguir formando parte del denominado Grupo de Lima, la alianza regional integrada por 14 países, para ejercer presión sobre el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
Según la diplomacia argentina, el presidente Alberto Fernández renunció al grupo al considerar que las acciones que se impulsaron desde allí “no han conducido a nada” y que tenían como objetivo “aislar al Gobierno de Venezuela y a sus representantes”.
La Cancillería de Argentina, a través de un comunicado, destacó que, desde la llegada de los Fernández a la Casa Rosada, “la Argentina nunca participó en reuniones ni firmó documentos” del Grupo de Lima y destacó que “su gestión lo único que hizo” respecto a la alianza regional, que incluye a Brasil, Colombia, Paraguay, Chile y Perú, “fue tomar distancia”.
No obstante, la decisión presidencial fue cuestionada por el Departamento de Estado de Estados Unidos y comienza a tomar fuerza en la Casa Blanca la sospecha de que que Alberto Fernández cumple las órdenes de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
APOYAR A MADURO ES SER COMPLICE DE ASESINOS!!
Ayer la Argentina salió del Grupo de Lima. El gobierno nacional eligió la dictadura de Maduro un 24 de marzo.
Desde la oposición, condenamos rotundamente la decisión de abandonar esta lucha por los derechos humanos de los venezolanos. pic.twitter.com/ojh0Z1PxEE— Walter Unrein (@walterunrein) March 25, 2021
Según la Cancillería argentina, Fernández diseña una salida a la crisis de Venezuela que no implique satisfacer “la agenda regional de los Estados Unidos”. Según esto, el presidente estaría conversando con Bruselas, Canadá y México, miembros plenos del Grupo de Contacto, para abrir una nueva mesa de negociaciones que incluiría a Maduro.
Estados Unidos reaccionó a la salida de Argentina del grupo regional y reiteró la necesidad imperante de que en Venezuela “haya elecciones libres y justas” y señaló que “espera fortalecer la coordinación con los socios internacionales”.
“Estados Unidos cree que debe haber una solución negociada para la crisis precipitada por Maduro. Debe haber elecciones presidenciales y parlamentarias libres y justas en Venezuela. Esperamos fortalecer la coordinación con los socios internacionales que están comprometidos con un futuro pacifico y democrático en Venezuela”, aseguró un portavoz de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estad citado por el diario argentino Clarín.
Argentina fue uno de los miembros fundadores del Grupo de Lima bajo la administración de Mauricio Macri, pero desde que asumió el actual Gobierno se fue alejando de apoco del compromiso asumido en aquel entonces.
Si bien Estados Unidos no es miembro del Grupo, su opinión tiene mucho peso en ese foro.
Cabe destacar que el presidente Joe Biden continúa con las políticas de sanciones de Donald Trump y también reconoce a Juan Guaidó como presidente interino de la nación petrolera.
Asimismo, las acciones del Gobierno argentino podrían tener consecuencias en su vínculo diplomático con Washington, particularmente en la renegociación de la deuda, que ponen al ministro de Economía, Martín Guzmán, en una posición complicada a dos días de su encuentro con Cristalina Georgieva, titular del Fondo Monetario Internacional, ya que los dos funcionarios contaban con el apoyo de Biden y su administración.