COPENHAGUE.- El Gobierno danés quiere eliminar por completo las comunidades paralelas, también conocidas como guetos, para el año 2030. Para lograr su objetivo, el Ejecutivo derechista tomará medidas drásticas.
En total hay 29 de estos barrios en la totalidad el país lo cuales albergan a unas 63.500 personas aproximadamente, según datos oficiales actualizados el 1 de diciembre del año que corre. Durante el 2018 se gestaron ocho barrios más respecto al anterior y, según sostiene el Gobierno, es por culpa de la crisis migratoria.
La gran mayoría de los guetos están habitados en un 50% por inmigrantes o hijos de inmigrantes de países no occidentales, además conviven con problemas de delincuencia, desempleo, falta de educación y pobreza. Ante estas problemáticas Ante estas problemáticas el Ejecutivo de Lars Løkke Rasmussen decidió aprobar un paquete de 22 medidas que incluye la duplicación de penas en los crímenes cometidos en estos áreas y la prohibición de enviar a los hijos al país de origen de sus padres durante las vacaciones escolares.
El Ejecutivo considera que estos problemas se solucionaran solo si se realiza un cambio radical. Entre las medidas que impondrán está: la venta y/o demolición de las viviendas de barrio y se dispersará y reubicará a las personas para que consigan una mayor intregración social; además, se prohibirá a las personas con prestaciones sociales volver a alquilar una vivienda en el misma barrio y la prioridad en las listas de espera las tendrán aquellos con empleo fijo y otras formas de sustentación fehacientes.
Paralelamente se puso en marcha una ley que estipula que a aquellos barrios donde se arrastran conflictos desde hace cinco años se les quitará un 40% de vivienda social y ese dinero se utilizará para demoler otros guetos y/o vender o convertir los establecimientos en asilos. Esta ley tiene el objetivo de transformar en menos atractivos los barrios a fin de que los inmigrantes rechacen por iniciativa propia.