WASHINGTON.- El gobierno estadounidense planea permitir el ingreso de 30.000 trabajadores temporales extranjeros para hacer labores estacionales hasta finales de septiembre, una medida que refleja cómo la economía en auge ha complicado los esfuerzos de Donald Trump de restringir la inmigración legal.
La puesta en marcha de ese plan beneficiará a las compañías que desbullan ostras, pescaderías, madereras y hoteles estaciones, incluido el club “Mar-a-Lago” propiedad de Trump, los cuales contratarán inmigrantes para trabajos estacionales que según activistas, los estadounidenses no harían.
Las visas, conocidas como H-2B, serán entregadas sólo a extranjeros que la han tenido en los últimos tres años fiscales Muchos de ellos regresan con los mismos empleadores año tras año. Aquellos trabajadores ya han sido aprobados, son de confianza y esposo probable que se queden una vez que expiren sus visas, dijeron las autoridades.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos comenzará a recibir solicitudes de empleadores a nombre de los trabajadores una vez que la norma se publique en el Registro Federal, probablemente el miércoles.
La sólida economía ha complicado los esfuerzos por encontrar mano de obra y el número de visas temporales es de máximo 66.000 por año fiscal, una cantidad que algunas empresas y legisladores consideran desactualizada, sobre todo cuando la tasa de desempleo está en su nivel más bajo en 49 años.