LONDRES.— Las autoridades del Reino Unido anunciaron la intención de ampliar los poderes de las fuerzas del orden para hacer frente a las protestas que derivan en bloqueos de vías públicas y otras perturbaciones.
Una enmienda presentada a la ley del orden público ampliará la definición de «perturbación grave«, proporcionando a la Policía «claridad absoluta sobre cuándo debe intervenir», según el comunicado oficial.
Así, la Policía podrá disolver las protestas «antes de que estalle el caos» y considerar el impacto general de varias manifestaciones de un mismo grupo, en lugar de tratarlas como incidentes separados, así como «campañas de larga duración diseñadas para causar interrupciones repetidas durante un período de días o semanas».
«El derecho a la protesta es un principio fundamental de nuestra democracia, pero no es absoluto. Debe lograrse un equilibrio entre los derechos de las personas y los derechos de la mayoría trabajadora para realizar sus actividades cotidianas«, manifestó el primer ministro Rishi Sunak.
El premier británico calificó de intolerables las protestas de «una pequeña minoría perturbando la vida del público común». «La Policía nos pidió más claridad para reprimir estas tácticas guerrilleras, y hemos hecho caso», resumió.
El año pasado año, el grupo ambientalista Just Stop Oil que, se opone a nuevos proyectos de producción de gas y petróleo en el Reino Unido protagonizó una serie de acciones sonadas.
Sus activistas arrojaron latas de sopa de tomate al famoso cuadro Los girasoles, de Vincent van Gogh, así como lanzaron pinturas contra edificios emblemáticos, entre ellos las sedes del Ministerio del Interior, el servicio de seguridad MI5 y el Banco de Inglaterra, o una boutique de Rolex.