CANBERRA.— Un reciente repunte en los precios del litio podría aliviar la presión sobre algunos productores australianos golpeados, que han intentado reducir su exposición a este material clave para baterías, llevando incluso a abandonar planes de venta de proyectos, según fuentes y analistas.
Las acciones de las mineras de litio en Australia han subido hasta un tercio este mes y extendieron las ganancias esta semana, después de que los recortes de suministro en China despertaran esperanzas de un cambio de ciclo.
Esto ocurre tras años de caídas de precios, provocadas por ventas de vehículos eléctricos más lentas de lo esperado, lo que obligó a las compañías a suspender operaciones y, más recientemente, a considerar la venta de activos para recomponer sus balances.
Mineral Resources (MinRes) (MIN.AX) de Australia y SQM (SQMA.SN) de Chile han intentado vender participaciones en sus operaciones este año, dijeron fuentes a Reuters bajo condición de anonimato, mientras que IGO (IGO.AX) busca reestructurar una planta de refinado de litio en sociedad con la china Tianqi Lithium (002466.SZ).
Aunque el repunte ha sido impulsado por especuladores, servirá para aliviar a productores que estaban quemando efectivo, señalan analistas. Esto podría sacar del mercado activos que estaban en venta, frustrando a potenciales compradores que buscaban adquirirlos en el punto más bajo del ciclo, en un momento en que Occidente corre por construir una cadena de suministro de baterías fuera de China.
“El hilo común en esta historia son los precios y condiciones de mercado desastrosos”, dijo Dan Morgan, analista de Barrenjoey en Sídney. “Todos los productores australianos estarán respirando aliviados… Algunas opciones estratégicas difíciles que estaban evaluando podrían quedar archivadas”.
El precio del espodumeno, un mineral portador de litio, ha repuntado hasta unos 880 dólares la tonelada desde mínimos de cuatro años cerca de 610 dólares a mediados de junio, aunque sigue muy por debajo de los picos de 2022, por encima de 6.000 dólares.
“Posiblemente lo peor haya pasado para el sector, pero sigue siendo difícil de predecir, ya que no está claro si estos recortes son temporales o permanentes”, dijo E&P Financial en un informe, en referencia a la reducción de oferta en China.
El lunes, el gigante chino de baterías para vehículos eléctricos Contemporary Amperex Technology (CATL) (300750.SZ) anunció que había suspendido operaciones mineras en la región sureña de Yichun tras expirar una licencia el 9 de agosto.
El repunte de las acciones probablemente se debió a coberturas de posiciones cortas, indicaron analistas. Las mineras de litio australianas están entre las cinco compañías más vendidas en corto de la bolsa ASX, según datos de Shortman.
Posibles ventas
El proceso de venta iniciado este año por MinRes, endeudada, sobre sus activos de litio Mt Marion y Wodgina en Australia Occidental atrajo interés de India y Japón, pero fracasó cuando los compradores rechazaron el precio de más de 2.000 millones de dólares, dijeron dos fuentes familiarizadas con el asunto.
“Como política, no comentamos sobre especulaciones del mercado”, dijo un portavoz de la empresa, aunque añadió: “MinRes siempre busca oportunidades para maximizar el retorno a los accionistas”.
En marzo, Reuters informó que cuatro empresas estatales indias negociaban con SQM la compra de un 20% de participación en sus dos proyectos de litio en Australia por 600 millones de dólares, como parte de los esfuerzos de Nueva Delhi para asegurar suministros de este metal clave para baterías de vehículos eléctricos. SQM no realizó comentarios.
El mes pasado, IGO dijo que evaluaba opciones sobre su refinería de litio deficitaria, lo que analistas esperan incluya la venta de su participación. IGO declinó hacer comentarios.
Así como Australia ha soportado el grueso de los recortes de producción globales, la oferta podría volver al mercado, enfriando los precios. A finales del año pasado, Pilbara Minerals (PLS.AX), el mayor productor independiente del país, puso en cuidado y mantenimiento su planta Ngungaju en Australia Occidental debido a la debilidad sostenida en los precios del espodumeno.
Si las condiciones mejoran, la planta podría reanudar operaciones en tan solo cuatro meses, dijo el 1 de agosto su CEO, Dale Henderson.