LONDRES.- Este martes la patronal británica exhortó al gobierno a ayudar más y sin demora a las empresas que se han visto amenazadas por la crisis sanitaria, con una prolongación del desempleo parcial e incentivos fiscales.
Ante el temor de que miles de pequeñas empresas puedan cerrar sus puertas, la Confederación de la Industria Británica (CBI, por sus siglas en inglés) pidió al ministro de Finanzas, Rishi Suna, que actúe urgentemente, alegando que no se puede esperar hasta su presupuesto anual del 3 de marzo para tomar medidas.
“En las próximas semanas las empresas tomarán decisiones difíciles sobre los empleos, o incluso sobre el hecho de continuar con la actividad”, advirtió Tony Danker, director general de la CBI.
“Si el gobierno prevé seguir ayudando, entonces le pido que actúe antes del presupuesto”, dijo.
Reconoce que las autoridades ya han hecho mucho por las empresas desde el comienzo de la pandemia, pero muchas de ellas están en peligro de cierre por la caída de la demanda debido a las restricciones impuestas por el coronavirus.
Cabe recordar, que Inglaterra vive su tercer confinamiento, el más estricto desde el de la primavera boreal, que provocará una nueva recesión.
El CBI, que representa a 190.000 empresas, quiere que el Gobierno de Boris Johnson prolongue más allá de abril, hasta finales de junio, el dispositivo de desempleo parcial para limitar los estragos sociales y preservar el empleo.
También aboga por aplazar el pago del IVA y por mantener por tres meses más la exención del impuesto sobre los locales comerciales, lo cual ayudaría sobre todo al comercio y la restauración.
El gobierno ya movilizó casi 300.000 millones de libras, unos 408.000 millones de dólares, desde que comenzó la crisis sanitaria para intentar mitigar los estragos en la economía.