WASHINGTON.— La deuda pública de Estados Unidos superó por primera vez en la historia los 30 billones de dólares, según datos del Departamento del Tesoro publicados este martes, tras un aumento de 7 billones en los últimos dos años, coincidiendo con la pandemia de coronavirus.
Varios expertos apuntan que el abultado umbral fue alcanzando mucho antes de lo que preveían las autoridades.
“Fue el resultado de los gastos millonarios del Gobierno para combatir la pandemia de (coronavirus). Los pagos de los subsidios por desempleo, las medidas de apoyo a la pequeña empresa y el pago de estímulos”, sostiene el diario The New York Times.
La mayoría de los economistas consideran que la deuda récord estadounidense no indica que se avecina una catástrofe, ya que, aducen, la economía crece a pesar de la pandemia y las tasas de interés están en un nivel muy bajo.
Estados Unidos nunca ha tenido que declarar la suspensión de pagos de su deuda nacional, pero estuvo muy cerca de hacerlo en 2011; cuando la mera posibilidad de que eso ocurriera desató el caos en los mercados financieros y llevó a Standard & Poor’s a rebajar la nota de solvencia del país.
Cada cierto tiempo, Estados Unidos se asoma al impago de la deuda nacional, porque a diferencia de otros países el Gobierno estadounidenses solo puede emitir deuda hasta el límite establecido por el Congreso, que tiene el poder de elevar ese techo según lo crea conveniente.