WASHINGTON.— La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, presentó una demanda civil contra Donald Trump y tres de sus hijos en la investigación sobre prácticas fiscales de su empresa, la Organización Trump, reforzando la presión de la Justicia sobre el expresidente estadounidense.
James, una funcionaria electa demócrata, indicó que busca 250 millones de dólares en reparaciones en nombre del estado de Nueva York, así como la prohibición de dirigir empresas para Donald Trump y sus hijos, Donald Trump Jr, Eric Trump e Ivanka Trump.
El magnate republicano, de 76 años, también es investigado por su papel en el ataque al Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero de 2021, así como por sus intentos de anular las elecciones presidenciales de 2020 y su manejo de documentos clasificados, lo que llevó recientemente al FBI a allanar su residencia en Mar-a-Lago, Florida.
La demanda de la Fiscalía de Nueva York, presentada en la Corte Suprema del estado, «demuestra que Donald Trump infló falsamente el patrimonio neto (de sus activos) en miles de millones de dólares para enriquecerse injustamente y engañar al sistema, así como a todos nosotros», aseguró James.
Según ella, el valor de los activos ha sido «manipulado repetida y persistentemente» para «animar a los bancos a prestar dinero a la Organización Trump en términos más favorables», «pagar menos impuestos» o incluso «para inducir a las compañías de seguros a brindar cobertura de seguros para límites más altos y a primas más bajas». «En resumen, mintió para obtener enormes beneficios financieros», señaló.
En su red social Truth Social, el expresidente denunció «una nueva caza de brujas», acusando a James de persecución política. «Letitia James es la fiscal más corrupta de la historia de Estados Unidos», añadió su hijo Eric Trump, procesado como vicepresidente ejecutivo de la Organización Trump.