CAMBERRA.- Canguros en fuga, miles de koalas rodeados por las llamas, una niña conduciendo sola un note a motor para escapar de las llamas y miles de personas en busca de refugio en las playas, son las imágenes de este fin de año en Australia.
🇦🇺#AUSTRALIA | 😭😭Tristes Imágenes😭😭….Canguros tratan de escapar de los incendios forestales. pic.twitter.com/si4ljH1u8H
— Rochex R. Robinson Bonilla (@RochexRB27) December 31, 2019
Las fotografías del país en llamas invaden las redes sociales y los medios de comunicación internacional acortan las distancias y muestran una nación comúnmente percibida como próspera, presa de incendios devastadores y al borde de una crisis humanitaria y ambiental.
Las altas temperaturas no permiten que los principales focos de los incendios sean controlados.
#2Ene #Australia Los incendios acorralaron a cientos de personas que se refugiaban en playas del sureste del país🔥.
pic.twitter.com/MYY5YlQ2fB – @eldiario
— Reporte Ya (@ReporteYa) January 2, 2020
La última ola de llamas, que ha estado ocurriendo desde septiembre después de un breve respiro invernal procedido por otro verano tórrido y ardiente, sumaba hoy al menos 18 muertos, ocho de ellos en las últimas 48 horas, a quienes se pueden agregar dos personas que están reportadas como desaparecidas.
No obstante, se teme que la situación esté comenzando, ya que el verano acaba de comenzar y en las zonas más afectadas, Victoria y Nueva Gales del Sur, se espera que el sábado haya una temperatura récord de 46 grados Celsius.
En estos días, el humo de los incendios era visible desde Nueva Zelanda, a más de 2.000 kilómetros de la costa australiana, donde la neblina coloreaba el cielo de naranja.
El gobierno ha desplegado aviones y barcos militares para brindar ayuda a los numerosos residentes y turistas, invitados a abandonar las zonas más expuestas, pero en que huyeron a las zonas costeras y están pasando las noches al aire libre.
Los alimentos, la gasolina y la electricidad son escasos en las zonas más afectadas.
La crisis sin precedentes provocó protestas callejeras para instar al gobierno a tomar medidas inmediatas sobre el cambio climático. El primer ministro australiano, Scott Morrison, quien en su mensaje de Año Nuevo Advirtió que las próximas semanas y meses “seguirán siendo difíciles”.