KABUL.- Fuerzas afganas apoyadas por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos han cometido durante los últimos años atrocidades que, en algunos casos, supondrían crímenes de guerra, según un informe de Human Rights Watch (HRW).
La ONG con sede en Nueva York documento 14 casos registrados entre finales de 2017 y mediados de 2019 en los que esas fuerzas paramilitares han matado a civiles, hecho desaparecer a detenidos o atacado centros médicos por supuestamente tratar a insurgentes.
Las milicias secretas, cuyo apoyo de la CIA continúa una tradición derivada de la guerra soviético-afgana de la década de 1980, han cazado durante mucho tiempo a los talibanes. Las milicias son consideradas una herramienta fundamental a medida que se intensifica el conflicto contra los rebeldes.
En distintos casos, las redadas, generalmente en áreas controladas por los talibanes, fueron acompañadas por ataques aéreos que “indiscriminadamente o desproporcionadamente” mataron a civiles, dijo HRW, y a veces, las tropas retuvieron a hombres y no le dijeron a las familias donde los retenían.
La CIA mantiene desde 2001 una operación antiterrorista en Afganistán que se desarrolla en paralelo a las operaciones del Ejército estadounidense y en la que ha reclutado, equipado y desplegado grupos paramilitares para perseguir a miembros del grupo terrorista Al Qaeda, los talibanes y desde 2014 del Estado Islámico.
HRW destaca que los talibanes también cometen frecuentemente violaciones a los derechos humanos y de esas reglas de la guerra, pero subraya que eso no justifica las acciones de los Gobiernos afgano ni estadounidense.