PEKÍN.— En febrero, el gigante estatal chino de defensa Norinco presentó un vehículo militar capaz de realizar operaciones de apoyo en combate de forma autónoma a 50 km/h, impulsado por DeepSeek, la empresa cuyo modelo de inteligencia artificial es el orgullo del sector tecnológico chino.
Funcionarios del Partido Comunista destacaron el lanzamiento del Norinco P60 como una muestra temprana de cómo Pekín está utilizando DeepSeek y la IA para alcanzar a Estados Unidos en la carrera armamentista, en un contexto donde los líderes de ambos países han pedido a sus ejércitos prepararse para un posible conflicto.
Una revisión de Reuters de cientos de artículos académicos, patentes y registros de adquisiciones revela un esfuerzo sistemático de Pekín por aprovechar la inteligencia artificial con fines militares.
Aunque los detalles sobre el funcionamiento de estas armas de nueva generación son secretos de Estado, los documentos sugieren avances en áreas como el reconocimiento autónomo de objetivos y el apoyo a decisiones en tiempo real en el campo de batalla, en paralelo con los desarrollos del Pentágono.
Dependencia tecnológica y chips prohibidos
Los documentos muestran que el Ejército Popular de Liberación (EPL) sigue utilizando chips Nvidia, incluidos modelos bajo restricciones de exportación de EE. UU.. No está claro si fueron adquiridos antes de las sanciones, pero patentes recientes (junio de 2025) confirman su uso en institutos militares.
Desde 2022, Washington prohíbe la exportación a China de los chips A100 y H100 de Nvidia. La empresa señaló a Reuters que no puede rastrear reventas de productos antiguos, y agregó que “el reciclaje de pequeñas cantidades de hardware usado no representa una amenaza nueva ni un riesgo de seguridad nacional”.
En paralelo, el EPL ha incrementado el uso de chips chinos como los de Huawei (serie Ascend), en línea con la campaña de Pekín para lograr “soberanía algorítmica” —reducir la dependencia de tecnología occidental y fortalecer su infraestructura digital crítica—.
DeepSeek, el cerebro detrás del nuevo arsenal
Según documentos revisados por Reuters, una docena de licitaciones militares del EPL en 2025 mencionan explícitamente el uso de modelos DeepSeek, mientras que solo una hace referencia al rival local de Alibaba, Qwen.
Los avisos de contratación vinculados a DeepSeek se aceleraron en 2025, con nuevas aplicaciones militares apareciendo regularmente. Washington acusa a la empresa de colaborar con las fuerzas armadas y los servicios de inteligencia chinos, mientras que el Departamento de Defensa de EE. UU. evitó comentar.
Un portavoz del Departamento de Estado afirmó que DeepSeek “ha brindado y probablemente seguirá brindando apoyo al aparato militar chino”, y anunció que Washington impulsará una estrategia global para compartir tecnología de IA solo con países aliados.
Perros robots, drones y planificación autónoma
China está desarrollando perros robot impulsados por IA, enjambres de drones autónomos, centros de comando inmersivos y simulaciones avanzadas de guerra, según los documentos.
En noviembre de 2024, el EPL publicó una licitación para perros robot con IA capaces de operar en grupo, detectar amenazas y eliminar explosivos. No se sabe si el contrato fue ejecutado, aunque imágenes oficiales muestran ejercicios militares con perros armados fabricados por la empresa Unitree.
Investigadores de Landship Information Technology, que integran IA en vehículos militares de Norinco, afirmaron en un informe de febrero que su tecnología basada en chips Huawei puede identificar objetivos a partir de imágenes satelitales y coordinar ataques con radares y aeronaves.
Según la Universidad Tecnológica de Xi’an, su sistema impulsado por DeepSeek evaluó 10.000 escenarios de combate distintos en solo 48 segundos, una tarea que normalmente requeriría 48 horas de planificación humana.
El camino hacia las armas autónomas
Los documentos revisados muestran una clara tendencia del EPL a integrar IA en sistemas de combate autónomos.
Patentes recientes describen drones capaces de reconocer, seguir y atacar objetivos de forma cooperativa y sin intervención humana directa. La Universidad Beihang, referente en investigación aeroespacial, usa DeepSeek para mejorar la coordinación de enjambres de drones contra amenazas “bajas, lentas y pequeñas” —término militar para drones y aeronaves ligeras—.
Pese a sus avances, los líderes militares chinos han prometido mantener “control humano sobre los sistemas de armas”, en medio de temores de una escalada sin control entre Pekín y Washington.
El ejército estadounidense también acelera su despliegue de miles de drones autónomos para 2025, como respuesta a la ventaja numérica china en vehículos aéreos no tripulados.
Chips estadounidenses, modelos chinos
Aunque China impulsa su sustitución tecnológica, el hardware de Nvidia sigue siendo citado en decenas de investigaciones militares. Reuters identificó 35 aplicaciones en las que el Ejército Popular de Liberación y universidades sancionadas por EE. UU. usan los chips A100 para entrenar modelos de IA.
Al mismo tiempo, presentaron 15 patentes basadas en chips Huawei Ascend, diseñados como alternativa nacional. En junio, la Universidad de Ingeniería de la Fuerza de Cohetes del EPL presentó una patente para un sistema de detección remota de objetivos entrenado con A100.
El coronel Zhu Qichao, del Instituto Nacional de Tecnología de Defensa, reconoció que las restricciones estadounidenses han afectado sus investigaciones “hasta cierto punto”, aunque insistió en que China está decidida a cerrar la brecha tecnológica.
Un portavoz de Nvidia restó importancia a la demanda militar china, asegurando que el país “ya cuenta con suficientes chips nacionales para todas sus aplicaciones de defensa”.
