AMÁN.- El primer ministro jordano, Omar al-Razzaz, anunció la remodelación de su gabinete el jueves, mientras el gobierno busca impulsar reformas destinadas a reactivar el crecimiento económico y recortar el gasto público.
Razzaz, un execonomista del Banco Mundial, fue nombrado por el Rey Abdullah II en junio para reemplazar a Hani al-Mulki, quien renunció producto de una crisis que vio algunas de las protestas más grandes en años por las medidas de austeridad planificadas que impulsó el Fondo Monetario Internacional, incluyendo aumentos de impuestos.
En un aparente intento por calmar el descontento generalizado por las crecientes dificultades económicas, Razzaz, quien había dicho que reevaluaría a su equipo luego de 100 días en el cargo, redujo el gabinete de 29 miembros a 27. Sin embargo, mantuvo inalterados a los ministerios clave, especialmente las carteras interiores, financieras y extranjeras, y advirtió que Jordania pagaría un precio muy alto si un proyecto de reforma fiscal no se aprobara este año.
Razzaz había enfurecido a los sindicatos y cuerpos cívicos cuando presentó el proyecto de ley inspirado por el FMI en septiembre, haciendo cambios mínimos sobre el que derribó a Mulki. Considerado como un mejor comunicador que su predecesor, Razzaz había prometido restaurar la confianza pública en un país donde muchos culpan a los gobiernos sucesivos por no cumplir con las promesas de revitalizar el crecimiento, que está estancado en alrededor del dos por ciento, reducir el desperdicio y frenar la corrupción.