MÉXICO D.F.- Los productores de goma de opio del sur de México, cuya actividad potenció el consumo de heroína en Estados Unidos, aseguran que los precios de su producto han caído, al parecer por la popularidad de opioides sintéticos. Esto los ha llevado a retomar viejas practicas conocidas, como el cultivo de marihuana.
Sumidos en la pobreza y el desempleo, los campesinos del convulsionado estado de Guerrero aseguran que los precios de la pasta de opio ha caído tanto que no alcanza para cubrir el costo de plantar, fertilizar, irrigar,limpiar y cosechar la materia prima de la heroína.
Varios campesinos le aseguraron a la agencia de noticias, The Associated Press, que ya no vale la pena cultivar amapola, “mejor cultivamos marihuana, produce más y no se plaga tanto”, aseguró uno de ellos.
Lo que ha motivado este cambio es la caída de los precios que pagan las bandas de narcotraficantes por un kilo de pasta de opio. Hace unos años, los campesinos dicen que llegaban a obtener entre 20.000 y 25.000pesos (1.200 y 1.250 dólares) por kilo. Este año los precios han caído hasta 250 dólares por la misma cantidad.
Los campesinos culpan el desplome a que cada vez con mayor frecuencia los narcotraficantes venden opioides sintéticos como el “fentanilo” en forma de pastillas o producen heroína a partir del opioide sintético para aumentar su potencia, lo que reduce la demanda de opioides naturales.