WALL STREET.— Los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE. UU. se mantuvieron cerca de sus niveles más altos en un mes este miércoles, mientras los operadores aguardaban la publicación de datos de precios al productor que podrían aportar más evidencia de que los aranceles comerciales están impulsando la inflación.
La tasa de los bonos a 10 años se mantuvo estable en torno al 4,48%, tras haber subido cinco puntos básicos el día anterior. En tanto, el rendimiento de los bonos a 30 años se sostuvo por encima del 5%.
Los datos de inflación de junio publicados el martes ofrecieron indicios tempranos de que los amplios aranceles de Donald Trump estarían empezando a trasladarse a los precios, lo que redujo las apuestas sobre recortes de tasas de la Reserva Federal y disminuyó el apetito por los bonos. A pesar de que el índice general fue más bajo de lo previsto, los mercados monetarios ahora asignan menos de un 50% de probabilidad a un recorte de tasas de la Fed en septiembre.
Mohit Kumar, estratega jefe para Europa de Jefferies International, dijo que está a la espera de que los datos de precios al productor que se publican más tarde este miércoles confirmen el impacto de los aranceles.
“Los próximos meses deberían mostrar una mayor inflación y un debilitamiento del empleo a medida que los efectos de los aranceles se hagan sentir”, explicó.
Aunque las cifras del martes fueron visualmente mejores de lo esperado, señaló Kumar, los detalles mostraron que el efecto arancelario ya comenzó a infiltrarse.
Bloomberg Economics proyecta que el Índice de Precios al Productor (PPI) general haya subido 0,3% en junio, y el PPI subyacente, que excluye alimentos y energía, un 0,2%, acelerándose desde el 0,1% registrado en ambos casos el mes anterior.
También este miércoles, la encuesta “Beige Book” de la Reserva Federal correspondiente a julio ofrecerá una visión cualitativa de la actividad económica regional.
Señales de repunte inflacionario en otros países desarrollados
Hay indicios de que la inflación también está repuntando en otros mercados desarrollados.
En el Reino Unido, los operadores redujeron sus apuestas a recortes de tasas por parte del Banco de Inglaterra, luego de que la inflación de junio superara las expectativas.
Los bonos británicos (gilts) cayeron en todos los tramos de la curva y la libra esterlina subió un 0,1%, a US$ 1,34, encaminándose a cortar una racha de ocho jornadas consecutivas a la baja.