El crudo Brent subió a $ 71.33 por barril a última hora del martes, marcando su nivel más alto desde el 3 de diciembre de 2014, y el índice de referencia estadounidense West Texas Intermediate ascendió a $ 65.86 el barril, su nivel más alto desde el 27 de marzo, en medio de la posibilidad de que Estados Unidos lleve a cabo ataques aéreos contra Siria.
Si bien Siria no es un productor de petróleo clave, la región de Medio Oriente en general es la exportadora de crudo más importante del mundo, por lo cual las tensiones que la involucran tienden a afectar los mercados petroleros.
En esta ocasión, las tensiones en cuestión se dan mientras el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y sus aliados occidentales, están discutiendo una posible acción militar después de culpar al presidente sirio, Bashar al-Assad, por un supuesto ataque con gas venenoso el sábado en Duma, la última ciudad bajo control rebelde en Guta Oriental. El régimen del país árabe y su aliado Rusia niegan haber utilizado armas químicas en detrimento de la población.