BRASILIA.— El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, reconoció la posibilidad de un fracaso en las actuales negociaciones para el acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea (UE). Lula afirmó que, si esto sucede, no será debido a la falta de voluntad por parte de los países sudamericanos.
«Si no logramos un acuerdo, tendremos paciencia. No será por falta de voluntad«, declaró Lula en una conferencia de prensa en Dubai, antes de dirigirse a Berlín para iniciar una visita oficial. «Lo que debe quedar claro es que no atribuyan la responsabilidad únicamente a Brasil o a Sudamérica», agregó.
Lula argumentó que son los países ricos los responsables de que el acuerdo no prospere, ya que no desean ceder y siempre buscan obtener mayores beneficios.
El presidente brasileño hizo hincapié en Francia, mencionando las declaraciones del presidente Emmanuel Macron durante una conferencia de prensa en la cumbre del clima (COP28) el sábado, donde expresó su oposición al acuerdo, lo que prácticamente obstaculizó las posibilidades de obtener un consenso sobre el tema.
El mandatario brasileño criticó a Francia por su postura proteccionista y por establecer obstáculos al acuerdo, alegando que busca favorecer a sus numerosos pequeños productores. «Nosotros ya no estamos bajo el yugo colonial.
Somos independientes y exigimos ser tratados con el respeto que merecen los países independientes que buscan comercializar sus productos», afirmó ante la prensa.
En este contexto, Lula enfatizó que los productos del Mercosur también tienen su valor y buscan lograr un equilibrio en las negociaciones. «Si no hay acuerdo, al menos quedará claro quién obstaculizó su logro», concluyó.
Por otro lado, el saliente canciller de Argentina, Santiago Cafiero, desestimó las expectativas generadas por Lula, el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sobre cerrar el acuerdo durante la cumbre del Mercosur que se celebrará del 6 al 7 de diciembre en Río de Janeiro.
«Cafiero expresó que las conversaciones continuarán y que se ha avanzado mucho, pero no se dan las condiciones para firmar el acuerdo», enfatizó, subrayando las dificultades en las negociaciones que llevan más de dos décadas.
En 2019, tras años de negociaciones, la UE y el Mercosur lograron un acuerdo político general para el pacto, sin embargo, algunos aspectos técnicos pendientes han complicado la discusión. Además, han surgido nuevas demandas en ambos lados de la mesa, especialmente en temas medioambientales por parte de la UE.
La cumbre semestral del Mercosur está programada para el 6 y 7 de diciembre en Río de Janeiro, con la esperanza de anunciar la conclusión positiva de las negociaciones con la UE, aunque estas expectativas han sido puestas en duda debido a las dificultades encontradas en la resolución de los temas pendientes.