WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rechazó las objeciones del Congreso y declaró la emergencia nacional el viernes, para completar la venta por más de 8 mil millones de dólares en concepto de armas a Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Jordania.
La administración Trump informó a los comités del Congreso que continuará con 22 ventas militares a saudíes, emiratíes y jordanos, lo que enfurecerá a los legisladores porque implica haber sorteado un precedente de larga data para la revisión de las principales ventas de armas por parte del Congreso.
Miembros del Congreso habían estado bloqueando las ventas de equipo militar ofensivo a Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos durante meses, enojados por el enorme número de víctimas civiles de su campaña aérea en Yemen, así como por los abusos a los derechos humanos, como el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi en un consulado saudí en Turquía.
Los legisladores y asesores del Congreso advirtieron a principios de esta semana que Trump, frustrado con el Congreso que estaba celebrando acuerdos de armas, incluida la venta de bombas a Arabia Saudita, estaba considerando utilizar una laguna en la ley de control de armas para declarar una emergencia nacional.
«El presidente Trump solo está utilizando esta laguna porque sabe que el Congreso lo desaprobaría. No hay una nueva razón de ‘emergencia’ para venderle bombas a los saudíes, para que caigan en Yemen, y eso solo perpetúa la crisis humanitaria allí», afirmó con enojo el senador Chris Murphy.
Murphy, demócrata, hizo público en Twitter el miércoles que Trump estaba considerando el vacío legal en la Ley de Exportación de Control de Armas para liquidar las ventas.
Varios de los colegas republicanos de Trump, así como los demócratas, dijeron que se opondrían a tal plan, por temor a que pasar por alto el proceso eliminaría la capacidad del Congreso de controlar no solo a Trump sino a los futuros presidentes de vender armas donde les gustaría.
El representante Mike McCaul, el principal republicano en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, dijo que la acción de la administración fue «desafortunada» y podría dañar las futuras interacciones de la Casa Blanca con el Congreso.
«Hubiera preferido que la administración utilizara el proceso de revisión de venta de armas codificado y establecido hace mucho tiempo», sostuvo McCaul en una declaración.
No es la primera vez que el Congreso y Trump se enfrentan por la política en la región de Medio Oriente o por la división de poderes entre la Casa Blanca y el Capitolio. La Cámara de Representantes y el Senado votaron para poner fin al apoyo militar de Estados Unidos para la campaña en Yemen a principios de este año, pero Trump vetó la resolución.