ATENAS.- Miles de personas se manifestaron en la noche de este miércoles en varias ciudades griegas en la primera protesta multitudinaria antivacunas de la pandemia.
La congregación fue contra la decisión del Gobierno de obligar al personal sanitario a vacunarse y limitar los espacios cerrados de la hostelería y ocio para los inoculados.
Solo en el centro de Atenas se reunieron alrededor de 3.000 personas, sin mantener las distancias de seguridad y prácticamente sin mascarillas, aunque también hubo manifestaciones en otras ciudades como Salónica, en el norte de Grecia, Patras, en en Peloponeso, o Heraclión, en la isla de Creta.
Muchos de los manifestantes enarbolaron banderas griegas y signos religiosos, varios levantaron cruces e iconos ortodoxos frente al Parlamento, en la plaza Syntagma, mientras se mezclaban los eslóganes de la protesta con el himno nacional y otros cantos nacionalistas.
La protesta fue organizada por el movimiento “Libertad de Nuevo” liderado por un médico cardiólogo que convocó a través de Facebook alegando que “cualquier práctica médica contra la voluntad del paciente está prohibida” y calificó al Gobierno conservador de Nueva Democracia de “fascista”.
En las últimas semanas la variante delta provocó un aumento considerable de los contagios en Grecia, que hace temer una cuarta ola veraniega, mientras el Gobierno intenta convencer a la población de que se vacune después de que el ritmo de inoculación se haya estancado.
Kyriakos Mitsotakis, primer ministro, anunció la vacunación obligatoria para los trabajadores de residencias de mayores y personal sanitario de centros públicos y privados, que serán suspendidos sin sueldo si no reciben la vacuna antes de las fechas ya estipuladas.
Grecia ha puesto 9.485,402 vacunas y cerca del 44% de la población ha recibido la paga completa. El objetivo del Gobierno es alcanzar al menos el 70% antes de otoño para evitar que el sistema sanitario colapso de nuevo.