WASHINGTON.- Elliott Abrams, enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, dijo que la administración del presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, al asumir el poder deberá mantener la presión sobre Venezuela, hasta que Caracas esté lista para entablar conversaciones reales.
“El pueblo de Venezuela tiene que tener libertad de elección. Y creo que será importante si la administración entrante deja claro que continuará presionando hasta que el régimen esté dispuesto a hacer una negociación real que conduzca a una elección presidencial”, aseveró Abrams en un debate virtual.
El diplomático además renovó el llamado para que los aliados del chavismo en el Gobierno y y el Ejército reconsideren su compromiso con Nicolás Maduro, diciendo que los anteriores cambios de régimen en la región han implicado campañas de amnistía e indicando que ele egreso al servicio público es una posibilidad, si los venezolanos así lo deciden.
La administración que asumirá el poder en Estados Unidos el próximo 20 de enero estaría inclinada a continuar con la política de Trump en Venezuela, insinuó Abrams, al explicar que la campaña de presión sobre Caracas fue un esfuerzo bipartidista.
Venezuela se encuentra en una severa crisis política desde el año pasado, cuando el diputado Juan Guaidó, líder de la Asamblea General, se proclamó mandatario interino del país en un intento por expulsar a Maduro, quien según la comunidad internacional, Estados Unidos y la oposición local está usurpando el cargo.
Las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela cayeron a su nivel más bajo después de que Washington reconoció a Guaidó como presidente de la nación petrolera.
Rusia, China, Irán, Bolivia, así como otras naciones, reconocen a Maduro como el único líder legítimo de Venezuela.