KABUl.- Una asamblea integrad por mile de dignatarios se reunirá este viernes en Kabul para pronunciarse sobre la liberación de 400 prisiones del movimiento Talibán, muchos de los cuales están implicados en mortales ataques contra afganos y extranjeros, tanto civiles como militares.
El futuro de estos prisioneros es un tema clave en la apertura de negociaciones de paz entre los talibanes y el gobierno, puesto que ambas partes se han comprometido a un canje de presos como paso previo al diálogo.
A primera hora de este viernes el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, pidió a la asamblea del pueblo afgano, Loya Jirga, que libere a los últimos prisioneros talibanes para dar paso a las negaciones interafganas.
“Estados Unidos felicita a los participantes de la Loya Jirga que se reunirá el 7 de agosto para consolidar el apoyo nacional a la paz. Entendemos que ellos decidirán que sobre una pronta liberación de los prisioneros que quedan en la lista de los talibanes, el último obstáculo para el inicio de las negociaciones interafganas”, declaró Pompeo en un comunicado.
El encargado de la diplomacia estadounidense reafirmó el apoyo de Washington a una paz sostenible en Afganistán, pero recordó que “las decisiones y la conducta de ambas partes en las negociaciones interafganas afectarán el monto el acallando de la futura asistencia de Estados Unidos”.
Kabul ha liberado a casi 5.000 talibanes, pero por el momento las autoridades se Jan negado a liberar a 400 reclusos reclamados por los rebeldes. Entre ellos, según la lista oficial a la que tuvo acceso la agencia AFP, hay muchos hombres encarcelados por delitos graves, y más de 150 condenados a muerte.
El documento también contiene un grupo de 44 cautivos “indeseables”, una especia de lista negra de personas consideradas problemáticas por las autoridades afganas y estadounidenses, y por otros países.
La Oficina del Consejo de Seguridad Nacional de Afganistán confirmó la liberación de 4.917 talibanes hasta el 2 de agosto.