LOMBOK.- Un poderoso sismo de magnitud 6,9 en la escala de Richter sacudió la isla indonesia de Lombok, donde dejó por lo menos 103 muertos, y se sintió en la vecina isla de Bali, donde fallecieron dos más.
En Kayangan, al norte de la isla afectada, murieron hasta 40 personas y muchos edificios sufrieron daños significativos. Llegó poca ayuda gubernamental por la dificultad que presentan los accesos, producto de las destrucciones. Un 75 por ciento de la zona está sin electricidad desde el domingo, según informaron las autoridades.
Las principales necesidades de la gente en las zonas afectadas son, en este momento, provisiones de agua y alimentos. La agencia de ayuda Oxfam aseguró estar entregando agua potable y haber dado refugio a 5 mil personas, aunque se estima que la cifra de desplazados por la catástrofe es de por lo menos 20 mil.