JARTUM.- Las fuerzas de seguridad irrumpieron en una sentada de protesta en la capital sudanesa de Jartum el lunes y se informó que al menos 30 personas murieron en el peor hecho de violencia desde el derrocamiento del presidente Omar al-Bashir en abril.
Las imágenes compartidas en las redes sociales y verificadas por Reuters mostraron escenas caóticas de personas que huían por las calles mientras estallaban disparos.
Testigos dijeron que una sentada al lado del Ministerio de Defensa, el punto focal de las protestas contra el gobierno desde diciembre, había sido despejada. Los manifestantes se lanzaron a las calles en otros lugares de Jartum y más allá en respuesta, estableciendo barricadas y obstáculos con piedras y quemando neumáticos.
El principal grupo de protesta acusó al consejo militar gobernante de perpetrar «una masacre» cuando se disolvió el campamento en la puerta del Ministerio.
El Consejo Militar de Transición (TMC) negó la masacre con un portavoz, el teniente general Shams El Din Kabbashi, al decir éste que las fuerzas de seguridad estaban persiguiendo a «elementos ingobernables» que habían huido al lugar de la protesta y causado el caos.
«El Consejo Militar de Transición lamenta la forma en que se desarrolló la situación, reafirmando su compromiso total con la seguridad de los ciudadanos y renovando su llamado a las negociaciones lo antes posible», afirmó en un comunicado.
Es probable que la violencia del lunes sea un golpe para las esperanzas de un reinicio de las conversaciones estancadas y un acuerdo negociado sobre quién debe gobernar en el período de transición después del derrocamiento de al-Bashir.