CARACAS.- Las casas de ayuda social en Venezuela reportan no dar abasto por la cantidad de niños que han tenido que acoger debido a que sus padres han migrado del país y quienes quedaron a cargo de su cuidado no tienen los recursos para su manutención.
Leonardo Rodriguez, abogado de la asociación civil de casas de acogida Don Bosco, aseguró que “hay un aumento en el número de niños que están quedando a cargo de algún familiar o de un vecino porque los padres se están yendo hacia Colombia o hacia otros países a trabajar, y por supuesto que lo hemos notado en la calle”.
Don Bosco ofrece refugio a cerca de 1.300 menores en 10 casas en todo el territorio bolivariano, y hace parte de los 86 asilos que no dependen del Gobierno. Rodriguez aseveró que contando los albergues del Estado, son cerca de 5.000 niños y adolescentes que han sido remitidos a estos lugares por orden de un tribunal.
A esta problemática se suman los hospicios que han tenido que cerrar por falta de recursos. Así aumenta el incierto futuro social de los niños, los enfermos, y los ancianos, los más débiles de la sociedad.
La oposición denunció que los albergues que no pertenecen a los programas sociales del Estado que otorgan alimentos subsidiados, han sido excluidos de toda ayuda, aumentando el riesgo de vulnerabilidad y abandono de estos niños.
