CIUDAD DE GUATEMALA.- Alejandro Giammattei fue juramentado este martes como nuevo presidente de Guatemala para un periodo de cuatro años, en sustitución del impopular Jimmy Morales, con la promesa de atacar la la corrupción, las temibles pandillas y contener los índices de pobreza.
En discurso eufórico tras la juramentación, Giammattei anuncio que buscará declarar las pandillas como “grupos terroristas” debido a la ola de muertos que provocan diariamente.
Hoy y siempre, ustedes son los verdaderos protagonistas de la historia de este país. He recibido su confianza en las urnas y voy a honrarla con esfuerzo, trabajo y dedicación. #IniciaElCambio
— Alejandro Giammattei (@DrGiammattei) January 15, 2020
El médico de 63 años dijo que presentará al Congreso “una iniciativa de ley que pretende declarar a las maras y pandillas como lo que son: grupos terroristas”, tildando a esos grupos de ser una “lacra que extorsiona, que asesina”.
Ha llegado el momento de que ya no se identifique a nuestro país con la violencia. Esta ley nos permitirá su persecución, enjuiciamiento y condena como lo que son: grupos terroristas. #IniciaElCambio
— Alejandro Giammattei (@DrGiammattei) January 15, 2020
El nuevo presidente relató que a lo largo de su vida le ha tocado “ver la muerte de frente” y que fue así como aprendió a “servir a los demás”. Giammattei anunció también una reforma educativa y antepuso como prioridad de su administración la lucha contra la desnutrición.
La Cancillería de la administración de Jimmy Morales, a cargo de la organización de la ceremonia de traspaso de mando, confirmó el pasado domingo la presidencia de 12 jefes de Estado y 50 delegaciones este martes. Sin embargo, solo seis presidentes llegaron a Guatemala para acompañar y felicitar a Giammattei.
En Guatemala, el narcotráfico y las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18 son responsables de la mitad de las 3.500 muertes violentas que se registran cada año en el país centroamericano, según datos oficiales.
Giammattei juró sobre la Biblia y sustituirá en el cargo por un periodo de cuatro años al mandatario saliente Jimmy Morales, quien no pudo acceder a un hotel donde se desarrollaría su investidura como diputado al Parlamento al ser increpado por ciudades inconformes.
Alrededor de 30 manifestantes los agredieron, persiguieron y no lo dejaron entrar, según constató la Agencia Efe.