BERLÍN.- La Agencia Federal de Tráfico Marítimo e Hidrografía (BSH) de Alemania ha dado su autorización para la construcción inmediata del gasoducto Nord Stream II en aguas alemanas.
Las obras, según la autorización anterior, no podían entrar en la Zona Económica Exclusiva de Alemana en el Mart Báltico hasta mayo. Ahora podrían reanudarse, aunque un recurso de las asociaciones ambientalistas podría volver a retrasarlas.
Pero no son los reparos de las asociaciones ambientalistas el principal escollo que han tenido las obras, después de que Estados Unidos amenazara a finales de 2019 con sanciones a las empresas que participan en el proyecto, que mejorará la conexión de Europa para recibir gas ruso.
Una empresa suiza se retiró entonces de la construcción, u aunque se retomaron las obras y 2,6 kilómetros de construcción en las aguas alemanas, los permisos del BSH expiraron en diciembre.
En su comunicado de este viernes, la Agencia explica que la extensión de la autorización es necesaria “debido a retrasos imprevisibles” fuera de las aguas alemanas, en referencia a las amenazas de sanciones estadounidenses.
Para proteger a las aves marinas, las autoridades limitaron los trabajos de construcción hasta fines de mayo a un máximo de 30 días por fase de construcción, a los que deben seguir pausas de 14 días.
Según el principal inversor del proyecto, la compañía rusa Gazprom, se habría completado el 94% del controvertido gasoducto, lo que supone más de 2.300 kilómetros de tuberías dobles submarinas. Faltan únicamente 150 km para terminar el despliegue.