RÍO DE JANEIRO.- El principal instituto de investigación de Brasil, Fiocruz, advirtió sobre una posible crisis de salud luego de que una presa con residuos mineros colapso provocando la muerte de por lo menos 134 personas.
El instituto señaló que la contaminación del ecosistema y del río Paraopeba podría precipitar la propagación del dengue, la fiebre amarilla o diarrea en comunicadas cercadas a Brumandinho, la ciudad donde la presa colapso el 25 de enero.
Los análisis del lodo contaminado y del agua del Río están en curso, pero los investigadores ambientales aseguraron que prevén encontrar concentraciones tóxicas de óxido de hierro y otros metales pesados.
A largo plazo, el reporte estableció que el aislamiento de las comunidades rurales, el estrés y trauma causado por la pérdida de un familiar, del trabajo o hasta un cambio drástico en la calidad de vida también tendrán un impacto significativo en la salud de las personas.
Los investigadores señalaron que se registra una mayor cantidad de casos de hipertensión, diabetes, afecciones cardiovasculares, infartos e incluso cáncer en los meses y años posteriores a los accidentes de este tipo.
Este fue considerado como el peor desastre ambiental de Brasil.
El colapso de la presa de Brumadinho liberó aproximadamente 12 millones de metros cúbicos de un lodo marrón rojizo, que amenaza con contaminar 48 municipios y podría afectar hasta a 1,3 millones de residentes.
Las autoridades siguen buscando a 199 personas que fueron reportadas como desaparecidas, pero no han encontrado a nadie con vida desde el 26 de enero.