ESTAMBUL.- Turquía no podrá diversificar las importaciones de crudo rápidamente, luego de que Estados Unidos pusiera fin a las exenciones en las compras a Irán, informó el jueves el ministro de Relaciones Exteriores turco, un día después de la fecha límite de sanciones impuesta por los Estados Unidos.
Washington exigió el 22 de abril que los compradores de petróleo iraní suspendan sus compras antes del 1 de mayo o enfrenten sanciones, lo que termina con seis meses de exenciones que permitieron a los ocho clientes más grandes de Irán, incluida Turquía, importar volúmenes limitados.
Mientras que Turquía logró un cambio gradual de su dependencia en gran medida del crudo iraní durante el año pasado, el ministro de Relaciones Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, declaró que sus refinerías no son adecuadas para el petróleo de otros países.
«No nos parece posible diversificar las fuentes de petróleo que importamos en poco tiempo», sostuvo en una conferencia de prensa, y agregó que Washington debería revisar su decisión.
«Tenemos que renovar la tecnología de nuestras refinerías cuando compramos petróleo de terceros países. Eso significaría que las refinerías permanecerán cerradas por algún tiempo. Esto, por supuesto, tiene un costo», agregó el canciller.
La Casa Blanca dijo que estaba trabajando con los principales exportadores de petróleo de Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos para garantizar que el mercado estuviera «adecuadamente abastecido».
Las importaciones turcas desde Irán han disminuido gradualmente desde mayo pasado, cuando Washington mencionó por primera vez posibles sanciones.
Ankara, que depende casi completamente de las importaciones para satisfacer sus necesidades energéticas, importó un promedio de 912.000 toneladas de petróleo por mes desde Irán hasta mayo, lo que representa el 47 por ciento de sus requerimientos totales de petróleo.
En los cuatro meses desde la imposición de sanciones en noviembre, Ankara ha importado un promedio de 209.000 toneladas de petróleo por mes de Teherán, o el 12 por ciento de sus necesidades, según los cálculos de la agencia de noticia Reuters, basados en datos regulatorios.
La semana pasada, Turquía dijo que estaba trabajando para convencer a Estados Unidos de permitir que la refinería de petróleo Tupras continúe con las importaciones de crudo iraní.
Las refinerías de la compañía son capaces de procesar crudo pesado y con alto contenido de azufre. Utilizó petróleo de 11 países además de Irán el año pasado, según la información en el sitio web de la compañía. Medio Oriente suministró el 80 por ciento de ese petróleo, y Rusia, Azerbaiyán y Kazajistán representaron el 14 por ciento.