Apagón intensifica la tensión en Venezuela

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A couple walks along a street during a power cut in Caracas on March 7, 2019. - The government of Nicolas Maduro denounced a "sabotage" against the main electric power dam in the country, after a massive blackout left Caracas and vast regions of Venezuela in the darkness. (Photo by YURI CORTEZ / AFP)

CARACAS.- El enviado especial para Venezuela de Estados Unidos, Elliot Abrams, dijo sobre el apagón que sufre la nación suramericana que es un “recordatorio” de que su infraestructura ha sido saqueada y descartó que los problemas de ese país estén relacionados con las recientes sanciones impuestas por Washington o sean culpa del gobierno de Donald Trump, como afirman las autoridades venezolanas.

Desde el jueves la mayor parte de Venezuela se encuentra sin electricidad obligando al gobierno a suspender las principales actividades. En ese marco, Juan Guaidó y el presidente Nicolás Maduro movilizarán a sus seguidores en la que será una nueva jornada de protesta en ese país.

El corte de luz comenzó el jueves a las 16 (hora local) y afecta a Caracas y la mayoría de los 23 estados de Venezuela. En algunas zonas, los vecinos tampoco tienen agua y están prácticamente incomunicados por la inestabilidad de las redes de telefonía e internet.

Además los hospitales viven una situación dramática; los que tienen plantas generadoras las usan solo para emergencias. Los vuelos fueron cancelados  cientos de personas quedaron a la deriva en el aeropuerto internacional Simón Bolívar.

“Convoco  todo el pueblo venezolano a expresarnos masivamente en las calles contra el régimen usurpador, corrupto e incapaz que ha puesto a oscuras a nuestro país”. Tuiteó el viernes en la noche Juan Guaidó.

Asimismo, Maduro quien también había convocado hace unos días a sus seguidores a manifestarse contra  el “imperialismo”, atribuye el apagón a una “guerra eléctrica” promovida por el “imperialismo estadounidense”, “¡Venceremos!”, aseguró el debilitado presidente.

La masiva falla eléctrica, la más prolongada en la historia de ese país, se produce en medio del hartazgo por la fuerte crisis económica, con escasez de medicinas y alimentos y una hiperinflación que ha provocado el éxodo de 2,7 millones de venezolanos desde 2017 según la ONU y que la OEA proyecta llegará a cinco millones este año.