AFRÍN.- Aviones de las fuerzas del régimen de Recep Tayyip Erdogan ejercieron un nuevo bombardeo contra la ciudad siria de la que más de 35 mil personas huyeron en las últimas 48 horas, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ofensiva “Rama de Olivo”, que comenzó el pasado 20 de enero, tiene como objetivo dominar todo el enclave para “crear un área segura y habitable” para los refugiados sirios en Turquía, según palabras del presidente al mando de la operación. El objetivo de Ankara son las Unidades de Protección del Pueblo (YPK), grupo al que considera terrorista por sus vínculos con la guerrilla kurda del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
En este último ataque de aeronaves con bombas perdieron la vida 16 civiles, entre ellos dos mujeres embarazadas, pero el número podría aumentar debido a la cantidad de heridos de gravedad. Las fuerzas turcas y facciones rebeldes sirias que las apoyan continúan, de esta manera, abriéndose paso por la región. Erdogan dijo al respecto que la ofensiva no se detendrá hasta dominar todo el enclave.
