COLOMBO.- La policía de Sri Lanka informó que el número de víctimas fatales por los atentados del domingo aumentó a 310, mientras que los heridos ya suman más de 500, en lo ya es calificado como el peor episodio de violencia vivido en ese país del sur de Asia.

El portavoz policial Ruwan Gunasekera detalló que las fuerzas de seguridad han realizado 24 arrestos relacionados con los ataques terroristas, todos ellos ciudadanos locales, aunque por el momento ningún grupo se ha atribuido las explosiones, que afectaron iglesias y hoteles de lujo en la capital Colombo, y otras localidades.

De igual manera el Ministro de Defensa, Ruwan Wijewardene, señaló que los primeros elementos de la investigación sobre los atentados del domingo revelaron que fueron en represalia por la reciente masacre en dos mezquitas de Nueva Zelanda, aseguró en conferencia de prensa este martes.

“Las investigaciones preliminares revelaron que lo que ocurrió en Sri Lanka fue represalia por el ataque contra los musulmanes de Christchurch”, declaró ante el Parlamento Wijewardene, en referencia al ataque que causó 50 muertos el 15 de marzo en dos mezquitas de la gran ciudad del sur de Nueva Zelanda.

Wijewardene dijo que las investigaciones revelan que el grupo llamado National Thowheeth Jama´ath (NTJ) estuvo detrás de los ataques, y que está vinculado a un poco conocido movimiento islamista radical en India, el JMI (Jamaat-ul-Mujahideen India).

El ministro agregó que su país está recibiendo apoyo internacional en la investigación, pero no ofreció más detalles sobre quienes lo respaldan.

De igual manera, tres policías murieron cuando otro suicida hizo estallar explosivos durante el allanamiento a una casa en busca de sospechosos, apuntó la misma fuerza de seguridad.