MANAGUA.- En un intento por disipar las protestas que volvieron a tomar fuerza estas semanas en la nación centroamericana, las autoridades han optado por incrementar el número de detenciones a opositores del gobierno de Daniel Ortega.
Gonzalo Carrión, director jurídico del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), aseguró a la AFP que cerca de 500 nicaragüenses están presos por dirigir, apoyar o participar en las manifestaciones, de los cuales más de 300 han sido acusados ante la justicia por “terrorismo” u otros delitos, aseveró el funcionario.
Desde el 18 de abril, el gobierno de Nicaragua se ha visto sacudido por protestas que piden la dimisión de Daniel Ortega. La represión contra los manifestantes ya deja más de 320 muertos.
Entre los capturados están 24 líderes del movimiento estudiantil 19 de Abril, nacido en las manifestaciones, pero muchos son capturados por andar con los considerados “objetos vandálicos”, como banderas, globos o cualquier insignia que indique que está contra el gobierno.
El Cenidh asegura que las personas son apresadas sin orden judicial, como el caso de los siete opositores de la ciudad de León, a quienes “no se les permitió llamadas, ni se les avisó a sus familiares de su detención”. Un informe publicado en agosto por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) reveló que “algunos detenidos han sido sometidos a torturas físicas”.