VIENA.— Austria aprobará un paquete de apoyo de 2.200 millones de euros, 2.440 millones de dólares, para combatir la inflación y el aumento de los precios de la energía, anunciaron el ministro de Finanzas, Magnus Brunner, y la ministra de Energía, Leonore Gewessler.
“Con este paquete de 2.200 millones, ayudamos inmediatamente a quienes lo necesitan, y con amplias medidas de protección del clima, acabamos paso a paso con la dependencia del gas ruso”, dijo Gewessler en una rueda de prensa conjunta con Brunner.
En particular, el paquete energético incluye recortes de impuestos para el gas y la electricidad, incentivos para los viajeros, desarrollo del transporte público y apoyo a las inversiones en energías renovables.
Las medidas se implementarán cuando el parlamento apruebe el paquete, agregaron los ministros.
Así, el volumen total de los alivios previstos para “reducir los costes de la vida cotidiana de los austríacos” ascenderá hasta “unos 4.000 millones de euros” hasta mediados de 2023, destacó Brunner.
A diferencia de otros Gobiernos, el austríaco descartó imponer un techo temporal a los precios de la energía y optó por “medidas a más largo plazo para reaccionar ante la inflación prevista”.
Entre ellas, destaca una rebaja de hasta el 90% de los impuestos al La Luz y al gas, así como un fuerte aumento, del 50%, de los subsidios a la movilidad por trabajo, explicó.