VIENA.- El Gobierno de Austria cerrará una mezquita en Viena vinculada a ideas turcas de extrema derecha y otras seis ligadas a una asociación árabe que difundía ideas próximas al salafismo, las cuales además adoctrinaban a menores de edad. En relación a esto, también expulsará 60 imanes financiados presuntamente por Turquía.
«Las sociedades paralelas, el islam político y el extremismo no tienen cabida en Austria», dijo hoy Sebastian Kurz, canciller del país europeo.
El motivo es porque aparecieron fotos de un grupo de niños que recrearon la batalla de Galípolique, imágenes en las cuáles vestían uniformes militares y posaron como cadáveres con banderas turcas. Dichas foros generaron un gran debate público en Austria sobre las ideas y los valores que imponen las mezquitas, por lo que se inició una investigación en la que colaboró la Comunidad de Culto Musulmán (IGGiÖ), asociación islámica mayoritaria en el país, y comprobó que las mezquitas en cuestión no estaban habilitadas.
El ministro del Interior, Herbert Kickl, aseguró alrededor de 60 predicadores junto a sus familias serán ser deportados por violar la ley que prohíbe recibir fondos desde el exterior. Desde que se aprobó dicha ley en 2015, nunca antes había sido aplicada.
El vice canciller, Heinz-Christian Strache, dijo que en Austria existe la libertad religiosa, pero no por eso se permitirá violar la ley y utilizar las creencias como adoctrinamiento político.
Por otra parte, hace algunos días el Gobierno anunció que tiene la intención de prohibir legalmente el velo islámico para niñas en jardines y escuelas primarias, para evitar discriminación y garantizar la igualdad de oportunidades.