NUEVA YORK.— El mandatario de Estados Unidos, Joe Biden, comunicó una asignación adicional de 325 millones de dólares en ayuda para Ucrania y adelantó la llegada de los primeros tanques Abrams, anunciados en enero, que estarán en Ucrania la próxima semana.
Esta declaración se efectuó al inicio de una reunión en la Casa Blanca entre miembros de su Gobierno y la delegación ucraniana, encabezada por el presidente Volodímir Zelenski.
«He autorizado la próxima entrega de asistencia en seguridad de Estados Unidos a Ucrania, la cual incluye más equipamiento artillero, munición y armamento antitanque. Además, la próxima semana, los primeros tanques Abrams de Estados Unidos serán entregados a Ucrania«, señaló el presidente estadounidense.
El nuevo paquete de ayuda no abarca los misiles de largo alcance ATACMS, que Ucrania ha estado solicitando con insistencia durante meses y a los cuales Estados Unidos se ha negado a proporcionar por temor a provocar una escalada bélica con Rusia.
No obstante, el paquete sí incorpora armamento destinado a fortalecer las defensas aéreas de Ucrania contra posibles ataques rusos, tanto en el presente como durante la próxima temporada invernal, cuando Rusia pudiera atacar infraestructuras críticas como el suministro eléctrico necesario para mantener la calefacción en los hogares.
Concretamente, incluirá otra batería de defensa antiaérea HAWK, capaz de derribar aeronaves, así como sistemas aptos para interceptar misiles, con el propósito de proteger a la población civil.
Además de ello, Estados Unidos enviará a Ucrania munición para artillería y bombas de racimo, como ya había anunciado Joe Biden en julio, a pesar de las críticas de organizaciones como Human Rights Watch (HWR), que expresan preocupación por el impacto de dicho armamento en la población civil.