Brasil aprueba reforma al sistema tributario

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BRASILIA.—El Congreso de Brasil aprobó el viernes una reforma que simplifica el sistema impositivo de la mayor economía latinoamericana, marcando una victoria política para el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

Esta votación representa la primera reforma al sistema de impuestos al consumo en Brasil en 58 años.

La Cámara de Diputados aprobó la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) en dos votaciones separadas, obteniendo 365 votos a favor – superando los 308 necesarios – en la ronda final. Esta fue la segunda revisión del texto luego de las modificaciones realizadas por el Senado en noviembre de 2023.

El ministro de Hacienda, Fernando Haddad, expresó su satisfacción tras la votación al afirmar que «Brasil ha madurado. Necesitaba abordar esta agenda, la reforma más crucial que organiza todo el sistema productivo». Agregó que la reforma «coloca a Brasil alineado con los estándares más modernos del mundo».

El presidente de la Cámara Baja, Arthur Lira, catalogó el día como «histórico», destacando que la reforma persigue «desburocratizar y transparentar el cálculo de los impuestos».

Varios gobiernos habían intentado sin éxito avanzar en esta reforma desde el fin de la última dictadura militar (1964-1985). En esencia, esta reforma busca simplificar un sistema excesivamente complejo, aliviar las cargas en inversiones y exportaciones, y reducir la tributación sobre los sectores más vulnerables de la población.

Específicamente, la reforma fusiona cinco impuestos sobre el consumo en uno solo: el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA). Este se dividirá en un tributo federal y uno estatal. Además, reduce las tasas impositivas en áreas como salud, educación y artículos básicos, además de otorgar incentivos a fabricantes de vehículos eléctricos y biocombustibles.

El proyecto contempla una transición hasta 2033, momento en el cual todos los nuevos impuestos serán completamente instituidos.

El valor del IVA será determinado posteriormente por una ley, aunque se estima que rondará el 27%, una de las tasas más altas a nivel mundial, según estimaciones recientes del Ministerio de Hacienda. El Gobierno argumenta que esta cifra, junto con el consiguiente aumento en la carga tributaria sobre el sector de servicios, será compensada con otras medidas.