PYONGYANG.— El Gobierno norcoreano prometió dar una respuesta sin precedentes si Estados Unidos y Corea del Sur llevan a cabo los ejercicios militares conjuntos pactados por ambas naciones.
La información se desprende de un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte en el que advierte a los dos países involucrados en las maniobras militares.
Anteriormente, como resultado de las conversaciones entre los ministros de Defensa de Corea del Sur y Estados Unidos en enero pasado, ambos países acordaron aumentar el alcance de los ejercicios militares conjuntos, así como el intercambio de inteligencia, y además celebrar conversaciones trilaterales sobre cooperación en materia de seguridad con Japón.
«Estados Unidos y Corea del Sur están planeando más de 20 ejercicios militares conjuntos este año y además se aprestan a realizar el entrenamiento de campo más grande de la historia, lo que presagia que la península de Corea y la situación en la región volverán a verse sumidas en una vorágine de intensa tensión«, informa el comunicado.
«Si Estados Unidos y Corea del Sur llevan a cabo su plan de ejercicios, que consideramos preparativos para la guerra y la invasión, se enfrentarán a una respuesta fuerte y prolongada, sin precedentes«, manifestó un portavoz del Ministerio de la Cancillería norcoreana.
Debido a esta situación, Pyongyang también ha manifestado que: «La realidad demuestra claramente que Washington y Seúl son los archi criminales que perturban deliberadamente la paz y la estabilidad de la península de Corea y la región».
«Siendo este un hecho sólido, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas está deteniendo sin fundamento a la RPDC, que ha mantenido la paciencia y el autocontrol para calmar la tensión en la península coreana, sin mostrar alguna expresión de preocupación, y se aleja de disuadir a EEUU de intentar convertir la península de Corea en un teatro de ejercicios de guerra y en una base militar», acotó el portavoz, citado por la KCNA.
Sostuvo además lo siguiente: «Hacemos una seria advertencia y denunciamos enérgicamente el hecho de que el Consejo de Seguridad de la ONU puso el justo derecho a la autodefensa de un Estado soberano en la mesa de discusión solo a favor de EEUU, ajena a su principio fundamental de justicia e imparcialidad».
A fines de enero, Corea del Sur y Estados Unidos acordaron expandir y reforzar aún más el nivel y la escala de sus ejercicios conjuntos este año. El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo que Washington «se mantiene firme en su compromiso de disuasión ampliada», y agregó que Pyongyang había llevado a cabo una cantidad sin precedentes de «acciones de provocación» en 2022.