BRASILIA.- El Instituto Brasileño de Geografía y Estadística de Brasil (IBGE) reveló que unos 54,8 millones de brasileños viven en situación de pobreza, cifra que refleja un crecimiento de 7,4% en el índice de pobreza, en comparación con el registro de los últimos dos años.
Más de 25 millones de personas perciben ingresos inferiores a los 5,5 dólares por día. Entre ellos más del 10% viven el nordeste del país y pertenecen a la comunidad afrodescendiente, quienes representan el 75% de la población brasileña.
Además, unas 15,2 millones de personas viven en la pobreza extrema y subsiste con menos de 1,90 dólares diarios bajo condiciones precarias, con acceso a servicios básicos sanitarios, agua potable y electricidad.
En ese sentido, los analistas advierten que desde el 2017 en Brasil, no se han registrado avances del crecimiento de desarrollo sostenible, mientras que las condiciones de vida de los brasileños son cada vez peores, debido a la baja del ingreso económico del Producto Interno Bruto (PIB).
La pobreza en Brasil había aumentado en más del 11% en abril de este año, colocando a más de 14,83 millones de personas en pobreza, a consecuencia del declive de las inversiones (menor al 16% desde 2016), sumando a las medidas de ajustes y recortes económicos impulsados por el residente de facto Michel Temer, de acuerdo con datos del Banco Mundial de Brasil.
Asimismo, casi el 65% de las mujeres y niños afrodescendientes viven bajo desmejoras salariales, sin igualdad de condiciones ni oportunidades, detalla el documento.
Por otro lado, más del 40% de los brasileños no cuenta con servicio de luz eléctrica y preparan sus alimentos en fogones de leña, son contar con la exclusión de otros derechos tales como salud, educación y dignificación laboral.