SANTIAGO.- En pleno desierto de Atacama, lo más parecido a Marte en la Tierra, se levantó como una obra de ingeniería futurista Cerro Dominador, la planta termosolar que generará luz para unos 250.000 hogares a partir de 2020.
La planta termosolar de torre se sumará a la planta fotovoltaica de 100MW ya en operación desde febrero de 2018, para formar un complejo de energías renovables con una capacidad total de 210 MW y el primero que combina ambas tecnologías en todo el continente.
Este proyecto, vale la pena destacar, permitirá generar energía limpia de forma gestionada durante 24 horas y contará con una capacidad de almacenamiento térmico en sales fundidas de 17,5 horas. El campo solar, de 146 hectáreas, cuenta con 10.600 heliostatos que dirigirán la radicación solar a un receptor ubicado a 252 metros de altura.
A diferencia de una planta fotovoltaica tradicional, que requiere constantemente luz solar, la tecnología CSP “genera electricidad durante 17,5 horas”, sin necedad de que haya sol, aseguró Francisco Vizcaíno, director de Cerro Dominador, construido por las españolas Acciona y Abengoa, con una inversión de más de 800 millones de dólares aportados por el fondo estadounidense EIG Global Energy Partners.
Esta tecnología llega por primera vez a América Latina, aunque centrales de este tipo funcionan ya en España, Estados Unidos, Magreb, Arabia Saudita o China.
El gobierno de Sebastián Piñera aspira a que para 2040, el 100% de la matriz energética del país sea de origen limpio, un objetivo ambicioso teniendo en cuenta que en julio del año pasado, el 53,2% de la energía procedía de recursos fósiles.
El metro de Santiago, el segundo mayor consumidor de energía detrás de una empresa minera en el área metropolitana, también hizo una “apuesta de sostenibilidad” por las energías renovables. El 60% de su consumo proviene del sol y el viento, lo que reduce en un 15-20% su gasto energético, aseguró Rubén Alvarado, gerente general.
Asimismo, el país también apuesta por las baterías de litio y el hidrógeno desarmonizado o verde, en particular para el sector minero, el mayor consumidor de energía de ese país, con el 37%.
En total, son más de 11.000 millones de dólares en inversión en el periodo 2017-2021, que generarán 3.000 MW adicionales para 2023, según la corporación de Bienes de Capital, dependiente, de la patronal chilena.