PEKÍN.- China expulsó este miércoles al expresidente de Interpol Meng Hongwei del gobierno y el Partido Comunista antes de su juicio por cargos de corrupción.
Meng fue designado a presidir Interpol en 2016, pero su mandato de cuatro años terminó de forma anticipada cuando fue detenido sin previo aviso por las autoridades chinas el pasado octubre, durante una visita al paños desde la sede del organismo internacional en Francia.
En ese momento, Meng fungía también como viceministro chino de Seguridad Pública.
El comité disciplinario del gobernante Partido Comunista reveló este miércoles que una investigación halló que Meng era culpable de graves violaciones legales, que incumplió los principios del partido y no implementó sus decisiones.
Supuestamente, Meng abusó de su poder para satisfacer el “extravagante estilo de vida” de su familia y su esposa se habría aprovechado de su autoridad para beneficio propio, explicó el partido a través de un comunicado.
La expulsión del partido suele ser el último paso antes de que un sospechoso se exponga a un juicio y a una condena casi segura. Las acusaciones por corrupción suelen derivar en largas penas de prisión, incluyendo cadena perpetua.
Las esposa del exfunconario, Grace Meng, hizo un osado llamamiento desde Francia pidiendo ayuda para localizar a su esposo, con el que perdió contacto en septiembre. La petición, especialmente inusual en familiares de altos cargos chinos, evidenció sobre las desapariciones forzosas de disidentes y funcionarios presuntamente corruptos bajo el mandato del presidente Xi Jinping.
Grupos de derechos criticaron el nombramiento de Meng en 2016, apuntando a la falta de transparencia en el sistema legal chino y a la posibilidad de que emplease su posición contra opositores políticos de Pekín.
El exfuncionario está entre los altos cargos que se han visto envueltos en la alta operación de Xi contra los sobornos y la presunta deslealtad entre las filas de su Gobierno.