PEKÍN.- Este sábado China expresó su duelo por los miles de “mártires” que murieron durante el brote de COVID-19, izando la bandera nacional a medida asta en todo el país y suspendiendo toda forma de entretenimiento.
Los ciudadanos se quedaron de pie en las aceras y en silencio, mientras los automovilistas tocaban las bocinas de sus coches y sonaban las sirenas colocadas en casi cada esquina de las ciudades para alertar a la población ante una catástrofe.
#Wuhan aúlla de dolor en sus tres minutos de silencio por las víctimas del #coronavirus. pic.twitter.com/R9pztYSjlF
— Pablo M. Díez (@PabloDiez_ABC) April 4, 2020
El día de luto coincidió con el inicio del festival anula de Barrido de Tumbas de Qingming, en el que millones de familias chinas presentan sus respetos a sus antepasados.
Este sábado, Pekín guardó tres minutos de silencio para recordar a quienes murieron, incluyendo al personal sanitario y médicos de primera línea.
En Zhongnanhai, la sede del poder político en Pekín, el presidente Xi Jinping y otros dirigentes chinos rindieron homenaje en silencio frente a la bandera nacional, con flores blancas prendidas en el pecho como señal de duelo, según informaron los medios de comunicación del Estado.
Más de 3.300 personas han muerto en la epidemia en la China continental, que surgió por primera vez en la provincia central de Hubei a finales del año pasado, según las estadísticas otorgadas por la Comisión Nacional de Salud.
En Wuhan, epicentro de la pandemia, todos los semáforos de las zonas urbanas se pusieron en rojo a las 10 de la mañana y el tráfico cesó durante tres minutos.
Unas 2.567 personas han muerto en Wuhan, una enorme urbe de 11 de millones de habitantes situada en el curso medio Del Río Yangtsé. Las muertes de esa provincia representan más del 75% de las muertes del país.
Si bien lo peor ya pasó en Wuhan, el virus alcanzó todos los rincones del mundo desde enero, enfermando a más de un millón de personas, matando a más de 55.000 y poniendo de rodillas a la economía mundial.