PEKÍN.— El Banco Popular de China (BPC) anunció a través de un comunicado en su página web que reducirá la tasa referencial para créditos (LPR, por sus siglas en inglés) a un año del 3,65 % al 3,55 %. Esta es la primera modificación desde agosto pasado, cuando el banco central la redujo desde el 3,7 %.
La tasa LPR es un indicador utilizado como referencia para establecer los tipos de interés. Esta tasa influye en el precio de nuevos créditos, especialmente para empresas, y en los créditos de interés variable que están pendientes de devolución.
Su cálculo se basa en las contribuciones de varios bancos, incluyendo a pequeños prestamistas que tienden a tener mayores costos de financiación y una mayor exposición a créditos morosos. El objetivo de esta medida es reducir los costos de endeudamiento y respaldar la «economía real».
Expertos de la consultora británica Capital Economics prevén que, aunque la rebaja por sí misma no tendrá un gran impacto, se implementarán otras políticas de flexibilización en el futuro.
El recorte en la tasa «reducirá el costo de los préstamos», lo cual brindará un apoyo modesto a la actividad económica, explicó Julian Evans-Pritchard, experto de la consultora. Sin embargo, advirtió que dado el bajo nivel de demanda, es poco probable que esta reducción impulse un fuerte crecimiento en el crédito.
Los analistas de Capital Economics señalan que a corto plazo, la forma más efectiva que tienen las autoridades para estimular la demanda es ordenar a las entidades estatales que aumenten sus gastos.
En los últimos meses, las autoridades chinas han observado que la recuperación económica, después de levantar las restricciones relacionadas con el COVID-19 en enero, ha perdido impulso. Han identificado problemas como la debilidad de la demanda interna y externa, los desafíos en el suministro y los altos costos de las materias primas.