GINEBRA.- El enviado de la ONU para Yemen dijo que las partes en conflicto del país acordaron asistir a las negociaciones en Suecia destinadas a poner fin a más de tres años de guerra.
Martin Griffiths le dijo al Consejo de Seguridad de la ONU el viernes que el gobierno yemení y los rebeldes hutíes habían mostrado un «compromiso renovado» para trabajar en una solución política para poner fin a una guerra que ha llevado a millones de personas al borde del hambre.
«Recibí garantías firmes de parte de los líderes de los partidos yemeníes -el gobierno de Yemen, por supuesto, primero, y los hutíes- de que están comprometidos a asistir a estas consultas», aseguró. «Espero que aparezcan para esas consultas y, de hecho, también lo harán los yemeníes, que están desesperados por una solución política a una guerra en la que son las principales víctimas», explicó Griffiths, remarcando la diferencia respecto de la cumbre anterior, a la que los hutíes no asistieron por falta de garantías.
Griffiths dijo que planea viajar a la capital controlada por los rebeldes, Saná, la próxima semana para finalizar los arreglos e incluso se ofreció a viajar con la delegación de los hutíes a Suecia «si eso es lo que se necesita».
La nueva ronda de charlas de paz para poner fin a la guerra, que ha matado a más de 56.000 personas según una estimación reciente, estaba programada inicialmente para noviembre, pero se retrasó hasta finales de diciembre.
Griffiths dijo que la alianza militar de Riad y Abu Dhabi acordó «arreglos logísticos» para allanar el camino para conversaciones que incluyan evacuaciones médicas fuera de Saná. Añadió que estaba cerca de llegar a un acuerdo sobre un intercambio de prisioneros y detenidos, en una medida adicional de fomento de la confianza antes de las conversaciones planeadas.
«Este es un momento crucial para Yemen», dijo, advirtiendo que un estallido de combates en el terreno podría descarrilar el esfuerzo de paz.