LIMA.— La Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso peruano acordó tratar con el pleno del Legislativo que se declare persona non grata al presidente de Colombia, Gustavo Petro, por sus críticas a la Policía Nacional del Perú (PNP).
La comisión aprobó una moción que propone rechazar las «inaceptables» expresiones del mandatario colombiano al considerar que estas constituyen una «ofensa» a la PNP, al Estado peruano y a «todo el pueblo judío» al «banalizar el holocausto».
La moción se refirió a unas declaraciones que hizo el presidente colombiano en una actividad la semana pasada, cuando mencionó el amplio despliegue de la PNP en el centro histórico de Lima, en respuesta a una manifestación antigubernamental.
«En Perú, (los policías) marchan como nazis, contra su propio pueblo, rompiendo la Convención Americana de Derechos Humanos”, dijo el gobernante colombiano antes de indicar que esa convención «no se aplica solo a gobiernos de izquierda».
En ese sentido, la comisión legislativa planteó declarar a Petro persona non grata en Perú y exhortar a los ministerios del Interior y de Relaciones Exteriores a que realicen «las gestiones necesarias» para garantizar que «no ingrese al territorio nacional».
En enero pasado, el Gobierno peruano expresó mediante una carta diplomática su «enérgica protesta por un nuevo acto de injerencia» de Petro en asuntos de política interna, luego de que este se pronunciara sobre el desalojo de cientos de manifestantes en una universidad de Lima.
El Parlamento peruano también aprobó ya a fines del año pasado una moción en rechazo a «los constantes actos de intromisión en los asuntos internos» del país por parte de Petro y de su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
Ya en diciembre, el gobierno de Dina Boluarte mostró en diciembre su «profundo malestar» por las declaraciones de Petro en apoyo al expresidente Pedro Castillo, al considerarlas una injerencia «inaceptable» en los asuntos internos del país.
Perú ya declaró persona non grata al embajador mexicano en Lima, Pablo Monroy, y al expresidente boliviano Evo Morales «por sus constantes incitaciones en la política nacional» que, según el Parlamento, buscan «desequilibrar el orden interno del país«.